EL HERMOSO, PUEBLO CUNA DEL TRIBUNO JOSÉ FAUSTINO SÁNCHEZ CARRIÓN, CELEBRA CON JÚBILO SU 466 ANIVERSARIO DE FUNDACIÓN HISPANA Y DE VENERACIÓN A LA “VIRGEN DE LA ALTA GRACIA”.

                                    Dionicio Mantilla León. agosto del 2019

       Es cerca de las 00 horas y las bombardas chinas van dibujando en el azul de los cielos bellísimas rosas de mil colores, mientras abajo, en la vastedad y magnificencia de la Plaza de armas, se van encendiendo las “candeladas” como gigantesco collar cuyas lenguas de fuego van bailando al son de los “chirocos” y el tronar de veloces cuetes y avellanas que cruzando los aires como etéreos mensajeros anuncian la buena nueva. ¡Si señores y señoras! Es la víspera de un gran acontecimiento religioso e histórico. Es la víspera de una gran fiesta en los andes: La fiesta de la Virgen de Alta Gracia y el 466 aniversario de la fundación hispana de la gran ciudad de “San Agustín” de Huamachuco allá por los lejanos días del 15 de agosto de 1553.

      Ha llegado el día del estrechar de manos y abrazos de la amistad sincera, del olvido de odios y rencores, de la tregua a disputas y violencias. Es el magno día de los encuentros y los reencuentros, del juntamiento de encendidos corazones de amor por la santa tierra que durante cientos de años ha visto nacer y morir a sus hijos y cobijar a miles de foráneos.

     Ha llegado el día en que los miles de fieles católicos, el día central, rinden veneración a la Santísima Virgen María, Madre de Jesús el Cristo y, de sacarla en solemne procesión al son de quejumbrosos “chirocos” y vistosos danzarines bajo la curiosa mirada del festivo y alegre gallardete.

    Ha llegado el momento de recordar, con respeto y admiración, su glorioso pasado, su expectante presente y su promisor porvenir. De recordar a las preclaras damas y varones que escribieron la gloria de su historia y labraron su progreso. De recordar al Gran Ataguju, a Apucatequil y al Gran Tauricuxi que escribieran en roca sus hazañas y en los elevados muros de Markahuamachuco y Wiracochapampa, el símbolo de su grandeza.

     Es de Huamachuco su fiesta que comenzara el 29 de julio y terminará el 30 de agosto con la bajada del mismo, luego de dar pase a vistosos eventos festivos como el ceremonial de Gran Chaccu, el día 3; el evento de los Wamachukus en el barrio de Los Chancas, el día 10; la festividad de la Virgen en este mismo barrio, el 13; la noche de víspera, el 14; la fecha central, el 15; los eventos deportivos del 16 y, las sucesivas tres tardes taurinas en el enorme coso taurino, todo ello matizado con el danzar de cientos de conjuntos folklóricos entre inkas, canasteros, quillallas, indios fieles y la contradanza, esta última reconocida a nivel nacional como una de las mejores danzas folklóricas del Perú y valorada a nivel internacional.

         ¡Huamachuco está de fiesta! Lo pregonan así la suave brisa de sus vientos andinos, el murmullo de su río Grande, el aroma de su bella flor de la Cantuta; el singular cántico de sus quendes, el armonioso revolotear de sus liclics; en fin, las blancas y coquetas sonrisas de sus bellas mujeres, el dinamismo de sus laboriosos hombres y el coraje justiciero de sus ronderos.  ¡¡¡Felices fiestas patronales!!!!